lunes, 14 de junio de 2010

Nunca digas hasta nunca...-



Tristeza, compañera de mi alma,
amiga inseparable de mi vida.
Tu me sigues como mi sombra,
nunca podre separarme de tu
imagen, de tu luz sin brillo,
de tu sabor amargo.


Tristeza, compañera de mis noches sin sueño,
cargada de recuerdos, pañuelo de lagrimas
dulces y amargas, seguidoras de mis angustias.
Novia pálida de mi ser dolido por la ausencia,
de los amores perdidos, en los trajines de la vida.

Tristeza, pan de vida de mi espíritu indigente
agua cristalina que calma la sed del enfermo,
atormentado por la soledad de la ausencia,
tristeza, pura luz de la cruz del sur, que guía
mis pasos en el limbo oscuro de mi sendero.

La lampara de luz tenue de mi existencia se paga,
déjame en la oscuridad de mi buhardilla
no te marches así, espérame....

Que la luz del cielo ilumine mi mente y mi alama,
tristeza márchate, suavemente...
No me despiertes, quiero dormir mis sueños de recuerdos,
quiero calmar la fiebre de mi alma....
No me despiertes amiga....-

1 comentario:

  1. Me encanto, estos escritos merecen morir silenciosamente en ese cuaderno rojo :p

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